As Cronicas do Bragança "I" y Me Reafirmo...

Llevadas a la testa las sus manos,
el pulcro y buen Señor Serrano Alfredo,
quien quiso aseñalarme con lo dedo,
por el impropio uso que fice yo del Castellano;
que de mi relato en tiempos de Bragança,
no fice caso algun de la norma,
que gramatica instaurara Jovellanos,
y no lo tiempo en que los Castellanos,
allen de Benavente la acuciaran,
por tal de remandrela como propia,
y estoime refiriendo a la ciudad;
que nada de esto de la LENGUA hablaba.







Mas quienes de por ello me critiquen,
y hagan reprochar los mil demonios,
perdonen cuantos atropellos haga,
contando lo que acontecio en Bragança,
que he de seguir faciendolo en Romance,
no en la pulida lengua que se escribe
hoy dia en este nuestro siglo tan mundano,
que cuanto hubo de ocurrirnos en verano;
lo cuento destrozando nuestra lengua,
mi tan querido CASTELLAÑO.









Que impropio, Dios, un tanto ufano,
pensar que yo mesmo me habia metido un gol,
al dejar volar desde mi mano,
la rigida gramatica del ESPAÑOL...









Perdon por el enverso que pretendo,
perdon a quien ofenda mi exprsión,
esta es mi venganza y no la de Don Mendo,
mi libre manera de relatar la acción.









Tal vez olvide los acentos, las bes con las uves confunda,
tal vez palabros haga, o bien ficiera,
merzco, tal vez alguna tunda....
perdón he pedido por cuanto aun ni hiciera.








Ahora regresare libre a mi relato;
quedo libre de culpa si a alguien hiero,
tan solo voy a pasar el rato,
escribiendo en tono puñetero!!!